Cartagena de Indias termina semana sus Fiestas de la Independencia. Uno de los eventos más llamativos fue el tradicional Bando, teniendo el mar paralelo a comparsas, artistas, bailes, reinas, música y color.
En este escenario, los los vendedores ambulantes también jugaron un papel crucial en la celebración, ofreciendo agua, gaseosas y la tradicional espuma, todo dentro de esa economía del rebusque.
La Avenida Santander se transformó en un espectáculo visual con la participación de diversas comparsas, grupos artísticos y reconocidas figuras de la ciudad. Las aspirantes a señorita Colombia estaban en carrozas junto a las candidatas a reinas populares, ellas representan a los diferentes barrios de la ciudad heroica
Mientras el desfile transcurría un grupo unas voces se mezclaban con la algarabía. “¿En cuánto la gaseosa?” , “Échale sal al mango”, a 10 barras la espuma, esta no pica, dame unas cinco frias…»
Esmeralda Hernández Correa, una vendedora ambulante con 25 años de experiencia, sabe de la importancia de este evento para su negocio. Vende las bolsas de mango frescos que adquiere muy temprano en el mercado de Bazurto.
Su jornada para el dia del Bando, comienza a las 4:30 de la mañana, pelando y organizando . Lleva una bolsa con sal, «a algunos le gusta colocarle sal», dice mientras entrega una bolsa. «El valor es de $10.00 pesos y tengo la esperanza de venderlo todo, invertí $200.000 pesos. Dios quiera me generé el doble o el triple».
Mientras la gente ingresa a la avenida Santander, José Gregorio Campos, ofrece mecatos y productos típicos de noviembre, agua , gaseosa. Ha alquilado una carretilla de madera, lo que representa un desafío adicional para muchos vendedores.
«Mire jovencita, el alquiler de esta carretilla ha pasado de $10.000 a $20.000 pesos. Además, los gastos en hielo y otros insumos también se incrementan durante estas festividades, entonces toca lucharla para poder tener la ganancia, y mire cuanta competencia, pero ajá son las fiestas y también hay que gozársela».
Entre los gastos adicionales también se incluyen el hielo y otros insumos. Lo único seguro son las cavas para guardar el hielo y la esperanza de que el millón de pesos que le prestaron para su negocio genere las ganancias necesarias.
Fueron 22 carrozas que llevaban a las candidatas a señorita Colombia y Reina de la Independencia. Más de 170 comparsas y más de 6.500 artistas, quienes hicieron honor a la tradición, belleza y fraternidad, desfilando al lado del mar para llegar a un Centro Histórico, que cumple 40 años de haber sido declarado Patrimonio Histórico de la Humanidad.
” Creo que en los próximos años se podrían crear espacios para que los vendedores ambulantes cuenten con una mejor organización” le dijo a Colombia en Cifras, Dumek Turbay alcalde de Cartagena. “Se puede pensar en un futuro en una zona donde la economía popular pueda estar”.
La jornada, que integró comparsas locales y de departamentos como Bolívar, Chocó, Córdoba, Atlántico, Sucre, Tolima, Norte de Santander y Huila, fue un gran reto en términos de gestión de recursos.
Alejandra Espinoza Harris, gerente de las fiestas de la Independencia, destacó que el Instituto de Patrimonio y Cultura ha destinado recursos para generar estímulos a todos los sectores culturales, liderando un trabajo de curaduría cultural que busca fortalecer la promoción de la ciudad y el turismo cultural en una entrevista publicada por El Espectador.
«Se han invertido más de $10.000 millones de pesos del presupuesto de la Alcaldía Mayor de Cartagena para cubrir todos los frentes necesarios para tener unas fiestas a la altura de nuestra ciudad patrimonio.
Por su parte, el Instituto de Patrimonio y Cultura, ha destinado sus recursos de fiestas para la generación de estímulos a todos los sectores culturales. Ellos se han especializado en eso y han hecho un trabajo maravilloso, enorme, no solo de entregar el recurso, sino de hacer curaduría cultural, un trabajo que viene liderando nuestra Directora de IPCC, Lucy Espinosa Díaz».
A pesar de los desafíos, la esperanza y la determinación de los vendedores ambulantes seguirán en medio de la celebración, a fin de cuentas, como se lee en todas partes. «Estas son las fiestas que nos unen».
