La campaña electoral y la debilidad de la coalición del gobierno en el Congreso, son las dos razones básicas por las cuales el gobierno de Gustavo Petro no estaría convocando al Senado y la Cámara a sesiones extras después del 16 de diciembre, pese a que tiene pendiente una agenda grande e importante de proyectos.
En opinión del ministro del Interior, Armando Benedetti, por ahora no se está pensando en citar a los congresistas más días para sesionar, “a partir del 3 de septiembre con la elección del magistrado de la Corte Constitucional, Carlos Camargo, hubo un alejamiento, por así decirlo, el distanciamiento entre el Congreso y el gobierno a sabiendas de que los proyectos, por ejemplo, como el de la jurisdicción agraria debía ser y debe ser responsabilidad del Congreso, que es producto de un acuerdo de paz”.
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El ministro sostiene que “hay otro interés muy importante de la salud, pero yo creo que ellos están prevaricando porque se mandó un mensaje de urgencia e insistencia a la Comisión Séptima, donde ellos solamente pueden tocar ese tema, pero se escudaron cobardemente en el de que si no se aprobaba la ley de financiamiento, entonces ellos no podrían entonces aprobar o discutir la reforma a la salud cuando sabemos que lo que hay es un bloqueo político e institucional por parte de la comisión”.
“En principio no habría porqué convocarlos”, insistió el jefe de la cartera política, en momentos en que las Comisiones Primeras del Congreso están citadas para seguir el estudio del proyecto de ley que crea el Ministerio de la Igualdad, esto debido a que el mismo lo tumbó la Corte Constitucional, al momento de revisar su legalidad.
También están sesionando este miércoles las Comisiones Económicas el proyecto de la ley de financiamiento o reforma tributaria, el cual no tiene ambiente entre los congresistas, por ejemplo hasta el momento en la Comisión Tercera del Senado hay diez votos por el hundimiento del proyecto, con lo cual así la reforma logre ser aprobada en las otras tres comisiones, se hundirá.
Incluso el presidente del Senado, Lidio García, considera que el proyecto “no tiene mucha vida» en particular por el tema electoral en el que está el país, pero además advierte que por cuestiones de tiempo tampoco le alcanzaría al proyecto. La reforma tributaria, de pasar en las comisiones este miércoles, tendría que pasar a las plenarias del Senado y la Cámara después del 11 de diciembre, quedando sólo cinco días de las sesiones ordinarias para tener la ponencia definitiva, además de hacer audiencias y luego entrar a la discusión en las plenarias.
Colprensa

