El delantero ruso Nikita Kucherov ha reafirmado su estatus entre los grandes de la NHL tras una de sus mejores temporadas en 2024-25. Con un impresionante total de 121 puntos en 78 partidos (37 goles y 84 asistencias), se llevó el título de máximo anotador de la liga, ganando su tercer Art Ross Trophy.
Pero Kucherov no solo brilló por ser el que más puntos acumuló; también lideró en asistencias totales, asistencias en power play y asistencias primarias. Además, se destacó en la liga con un notable promedio de 1.55 puntos por juego. Su consistencia lo ha colocado entre los pocos jugadores en la historia que han logrado tres temporadas consecutivas con al menos 80 asistencias.
Su rendimiento fue tan excepcional que volvió a ser finalista para el Hart Trophy y se llevó el Ted Lindsay Award, que se otorga al jugador más destacado según la votación de sus compañeros.
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Durante el año, Kucherov también alcanzó dos hitos personales importantes: superó los 900 puntos en su carrera y registró su asistencia número 600, uniéndose a figuras históricas del Tampa Bay Lightning.
Gracias a su liderazgo ofensivo, el Lightning clasificó por octava vez consecutiva a los Playoffs de la Stanley Cup. Aunque fueron eliminados en la primera ronda, la temporada de Kucherov quedará como una de las más dominantes de los últimos tiempos.
Con apenas 31 años, Kucherov sigue dejando huella como uno de los mejores talentos de su generación.