Bogotá se prepara para vivir un fin de semana lleno de color, tradición y emprendimiento. Del 24 al 26 de octubre, el Parque 93 será el epicentro de “Sabores y Saberes – Hecho en Bogotá”, una feria gratuita que celebra la diversidad y el talento de los emprendedores de comunidades negras, afrocolombianas, raizales, palenqueras, indígenas y rom.
La iniciativa, liderada por la Secretaría de Desarrollo Económico, busca fortalecer la economía local y abrir nuevos espacios de visibilidad para más de 50 emprendimientos étnicos que transforman sus tradiciones en oportunidades de negocio.
Durante tres días, los visitantes podrán recorrer una muestra única de productos elaborados con técnicas ancestrales: moda, joyería, artesanías, café, postres, bebidas tradicionales y gastronomía típica. Cada creación representa no solo el arte de sus comunidades, sino también su aporte al tejido productivo de la capital.
Hecho en Bogotá sigue apoyando a los emprendedores
En el marco de la Semana Raizal, el sábado estará dedicado especialmente a este pueblo, con una agenda cultural que llevará sus ritmos caribeños, su gastronomía y sus expresiones artísticas al corazón de Bogotá. En total, 15 emprendimientos raizales harán parte de esta jornada, mostrando por qué la creatividad isleña conquista paladares y miradas.
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“Cada comunidad aporta una mirada única sobre lo que somos como ciudad. Esta feria es una vitrina para reconocer la fuerza creativa y productiva de los pueblos étnicos que hacen parte de nuestra Bogotá”, destacó Juliana Toral, subdirectora de Intermediación Empresarial de la Secretaría de Desarrollo Económico.
El evento no solo resalta la diversidad cultural, sino que también impulsa la inclusión económica y social, fortaleciendo los negocios locales y promoviendo la igualdad de oportunidades. “Sabores y Saberes – Hecho en Bogotá” se suma a las acciones afirmativas que reconocen el valor económico de las comunidades étnicas como motor del desarrollo sostenible y la innovación cultural en la capital.
La entrada es libre, y los bogotanos están invitados a disfrutar de tres días donde la música, la tradición y el emprendimiento se encuentran para recordarnos que la diversidad también se saborea.