Puente en el Cañón del Micay; Más de 1.200 soldados trabajaron para instalar un puente que había sido destruido por las disidencias de las Farc al mando de Néstor Gregorio Verá, en El Plateado. Ese fue el lugar en el que, hace algunos días, las disidencias asesinaron a cinco soldados y dejaron heridos a varios más, cuando estos transportaban material destinado para su construcción.
La instalación se llevó a cabo a pesar de los fuertes vientos, las lluvias torrenciales y más de doce ataques diarios con drones cargados de explosivos y minas antipersonales.
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“Vestidos de honor, culminaron la instalación del puente militar La Esperanza, una estructura que lleva consigo la memoria y el legado de dos suboficiales y tres soldados profesionales que perdieron la vida mientras transportaban los componentes del puente, en medio de un ataque perpetrado por el grupo armado residual Estructura Carlos Patiño”, informó el Ejército.
La institución militar agregó que, durante tres días de condiciones extremas, los soldados superaron los ataques premeditados para impedir la construcción, incluso los obstáculos derivados de la inhabilitación controlada de la antigua estructura, previamente derribada por grupos ilegales.
“No había balas, ni artefactos explosivos, ni amenazas que nos detuvieran. Este puente representaba la esperanza para una región olvidada”, expresó el teniente coronel Dagoberto Cárdenas Naranjo, comandante del Batallón de Despliegue Rápido N.° 10.
(Colprensa)
