Juicio Álvaro Uribe
El miércoles se retomará el juicio contra el expresidente Álvaro Uribe por los presuntos delitos de fraude procesal, soborno a testigos y soborno en actuación penal. En la diligencia de este lunes, el turno fue para el senador Iván Cepeda, quien es una víctima acreditada en el caso y el origen de lo que hoy se investiga.
El juicio contra Álvaro Uribe comenzó en 2018, cuando la Corte Suprema de Justicia abrió una investigación contra el expresidente por la presunta manipulación de testigos en el proceso que él mismo había iniciado contra el senador Iván Cepeda.
Durante las investigaciones, varios testigos se retractaron de sus declaraciones y uno de ellos, Juan Guillermo Monsalve, denunció que había recibido presiones para cambiar su versión.
La Corte Suprema archivó el caso contra Cepeda y abrió uno contra Uribe por los delitos de soborno a testigos y fraude procesal.
En ese contexto, y durante su intervención, Cepeda confirmó que en 2009 realizó visitas a varios presos en Estados Unidos, entre ellos Salvatore Mancuso, exjefe paramilitar y quien hoy es gestor de paz del Gobierno.
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Mancuso le habría dicho que fue extraditado para “decir verdades inconvenientes para figuras políticas, militares y hacendados ligados con la actividad paramilitar” y también mencionó haber tenido encuentros con el entonces presidente Álvaro Uribe.
El senador también detalló que en una entrevista con Juan Guillermo Monsalve, exparamilitar y testigo principal del caso contra Uribe, este le relató los detalles del regreso a la hacienda Guacharacas (propiedad de Uribe), después de haber tenido una reunión con Santiago Uribe, hermano del expresidente.
Cepeda también mencionó que en 2012 varios ex paramilitares, entre ellos Elmo José Mármol, Giony Cadavid y Máximo Cuesta, le solicitaron ayuda para entregar información sobre “fosas comunes”.
El senador precisó que, aunque estos exintegrantes de grupos armados no esperaban beneficios en sus condenas, sí deseaban entregar información. En contraste, Cepeda indicó que Robert Muñoz, otro exparamilitar, sí aceptó colaborar, y sus declaraciones fueron documentadas por el congresista.
Durante la audiencia, Uribe tuvo la oportunidad de contrainterrogar, pero gran parte de sus preguntas fueron desechadas porque no iban al caso de la investigación.
(Colprensa)