La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) anunció el despido de Simón Arango Noreña, un abogado vinculado como contratista, luego de confirmarse su participación en el borrado del mural «Las cuchas tienen razón» en Manizales. Este grafiti, realizado el 19 de enero, fue creado por colectivos artísticos y ciudadanos como un homenaje a las madres buscadoras de desaparecidos en la comuna 13 de Medellín.
El pasado 1 de febrero, Arango Noreña compartió una imagen en redes sociales donde se le veía borrando el mural. En su publicación, justificó su acción, asegurando que respetaba la infraestructura pública y rechazaba la apología política. «No a la apología política ni a la instrumentalización del dolor ajeno», afirmó en la red social X.
Despido y reacción de la JEP
La JEP no tardó en tomar cartas en el asunto. A través de un comunicado, la entidad expresó su rechazo a la actitud del abogado y anunció la terminación unilateral de su contrato. En su mensaje, la JEP dejó claro que el comportamiento de Arango Noreña afectó gravemente los derechos y la dignidad de las víctimas, especialmente en lo que respecta al derecho a la memoria.
“La JEP lamenta profundamente estos hechos y considera que la memoria y la verdad son esenciales para construir una sociedad justa y reconciliada”, agregó la entidad. La Jurisdicción destacó que tales acciones van en contra de los principios de paz y dignidad que guían su misión.
El mural «Las cuchas tienen razón» ha sido un símbolo de la lucha de las madres que buscan a sus hijos desaparecidos. Desde su creación, ha generado un intenso debate.
Bajo sus facultades contractuales y legales, la Jurisdicción Especial para la Paz terminó de manera unilateral el contrato de prestación de servicios suscrito por Simón Arango Noreña con esta entidad en razón a los actos de conocimiento público que afectan de manera grave los…
— Jurisdicción Especial para la Paz (@JEP_Colombia) February 5, 2025
Este grafiti no solo se pintó en Manizales, sino que se replicó en otras ciudades del país, especialmente después de que la Alcaldía de Medellín, bajo el mandato de Federico Gutiérrez, eliminara un mural similar en el sector del deprimido de la Terminal del Norte. El mural de Medellín hacía referencia a los hallazgos de cuerpos en La Escombrera, lo que desató una gran controversia.
Compromiso de la JEP con la paz y la memoria
En su pronunciamiento, la JEP reiteró que la memoria histórica y la verdad son fundamentales para el proceso de paz en Colombia. Además, destacó que su compromiso con los derechos de las víctimas es inquebrantable y rechazó rotundamente cualquier acción o declaración que busque vulnerar estos principios.
En este sentido, la entidad mostró firmeza ante el comportamiento de sus contratistas y servidores, subrayando que estos deben adherirse a los valores de dignidad y paz promovidos por la institución.
El despido de Arango Noreña subraya la importancia que la JEP otorga a la protección de la memoria histórica y el respeto hacia las víctimas del conflicto armado en Colombia. Este incidente también pone en evidencia la creciente polémica en torno al uso de los murales como herramientas de protesta y reivindicación social en el país.