Política monetaria en Colombia; En el marco de la 59ª Convención Bancaria, el presidente de la Junta Directiva de Asobancaria, Javier Suárez, ofreció un análisis profundo sobre los desafíos que ha enfrentado la política monetaria en Colombia en medio de un entorno económico global marcado por la volatilidad, el aumento de tasas de interés y el giro comercial de Estados Unidos.
Durante su intervención, Suárez recordó que, tras la crisis por la pandemia y la posterior recuperación acelerada, Colombia, como muchos otros países, enfrentó presiones inflacionarias sin precedentes. Estas se intensificaron en 2022 con el alza de precios agrícolas y el conflicto entre Rusia y Ucrania, lo que obligó a los bancos centrales a subir las tasas de interés a niveles históricos.
“El entorno financiero global cambió drásticamente en cuatro años. Pasamos de tasas de interés mínimas en 2020 a los niveles más altos en cuatro décadas para 2023”, explicó Suárez, quien también alertó sobre el deterioro del riesgo país en Colombia y el impacto de las calificadoras sobre la deuda pública.
Suárez destacó el valor de la estrategia de inflación objetivo adoptada por el Banco de la República, señalando que este modelo ha permitido al país mantener una política monetaria coherente y contracíclica ante condiciones externas adversas.
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“La política monetaria no puede controlar la incertidumbre global, pero sí puede generar señales claras y creíbles que estabilicen la economía”, aseguró. Además, resaltó que aunque el Banco de la República no fija metas para el tipo de cambio, estas variaciones inciden directamente en las expectativas de inflación y deben considerarse al definir la política económica.
El directivo también se refirió a los recientes cambios en la política comercial de Estados Unidos, que desde finales de 2024 ha impuesto aranceles sin precedentes y desconocido tratados de libre comercio, generando una incertidumbre aún mayor en los mercados internacionales.
“La simplicidad de nuestra estrategia radica en su claridad: cuando la inflación supera la meta, se ajustan las tasas para enfriar la economía. Cuando está por debajo, se estimula la demanda. Esa lógica ha sido fundamental para mantener el equilibrio macroeconómico”, concluyó Suárez.
La intervención de Javier Suárez reafirma la necesidad de mantener políticas económicas prudentes, que permitan a Colombia navegar con estabilidad en un entorno global cada vez más incierto.
