El gobernador del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, durante su intervención en el 12° Foro Energético Andeg, hizo un llamado urgente al Gobierno nacional y al sector eléctrico para adoptar medidas de fondo que garanticen la seguridad energética del país.
Advirtió que un nuevo racionamiento tendría efectos devastadores sobre la economía y la calidad de vida de los colombianos.
“El recuerdo del apagón de 1992, que nos costó el 3% del PIB, debe ser suficiente para actuar con responsabilidad. No podemos repetir esa historia: un racionamiento es el mayor golpe posible a la productividad, la competitividad y la calidad de vida”, subrayó Verano De La Rosa.
El mandatario destacó que, aunque los embalses reportan hoy niveles del 82.48%, el riesgo de un verano intenso o la falta de respaldo térmico confiable podría desencadenar una crisis.
Las soluciones que propone el gobernador del Atlántico
En este sentido, Eduardo Verano señaló que se deben dar soluciones de fondo como:
Una decisión política urgente en el Presupuesto Nacional 2026 para saldar las deudas de Air-e y Afinia mediante un fideicomiso transparente que garantice el pago a generadores y transportadores.
Fortalecer a ISA–Transelca como gestor técnico integral para ejecutar mantenimientos urgentes y destrabar proyectos represados.
(También le puede interesar: MinEducación inicia comisiones de salud del Fomag en Colombia)
Impulsar inversiones en infraestructura eléctrica (subestaciones, líneas de alta tensión y tecnología de control) que no pueden seguir aplazándose.
Avanzar en la transición energética con los más de 15.000 MW de proyectos solares y eólicos aprobados, pero de manera gradual y con respaldo firme de las térmicas.
Revisar el sistema tarifario del Caribe, que hoy castiga a los usuarios y frena la inversión.
“El Caribe tiene el mayor potencial de energías renovables del país, pero la transición no puede ser sinónimo de fragilidad. Necesitamos un modelo ordenado, equilibrado y realista”, precisó.
Verano recordó que las pérdidas de un racionamiento serían inmensas: un mes representaría 5,7 billones de pesos (0,33 % del PIB), tres meses 17 billones (1 % del PIB) y nueve meses —como en los años 90— más de 51 billones, equivalentes al 3 % del PIB actual.
“Estas cifras hablan por sí solas: el costo de no actuar es mucho mayor que el de pagar las deudas, ejecutar los mantenimientos, destrabar proyectos e invertir en el sistema”, concluyó.
La XXII versión del Foro Energético de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (Andeg) reunió a más de 360 asistentes, incluyendo líderes y expertos del sector energético, empresarios y representantes del Gobierno nacional.
El encuentro analizó los principales retos y oportunidades del sector eléctrico, resaltando la importancia de la institucionalidad y de señales claras de inversión como pilares de la seguridad energética nacional.
(Colprensa)