La Fiscalía ha tomado medidas drásticas en la lucha contra el narcotráfico al ocupar una serie de bienes valuados en 70.000 millones de pesos, presuntamente pertenecientes a Andrés Mauricio Vélez Hernández, ciudadano colombiano extraditado a Estados Unidos por cargos relacionados con esta actividad ilícita. Estos bienes, que incluyen 32 inmuebles rurales y 5 urbanos, así como 5 vehículos y 3 sociedades, fueron objeto de medidas cautelares como suspensión del poder dispositivo, embargo, secuestro y toma de posesión.
La operación, llevada a cabo por el CTI de la Fiscalía con el respaldo del Ejército Nacional, se desarrolló en diversos municipios de Santander, Boyacá, Caquetá, Risaralda y Valle del Cauca, donde se encontraban ubicadas las propiedades afectadas. Se estima que estas propiedades, adquiridas supuestamente a través de tres sociedades dedicadas al comercio agrícola, tienen un valor conjunto de 70.000 millones de pesos.
Según las investigaciones preliminares, estas empresas habrían sido constituidas en un lapso de tan solo 20 días, entre el 22 de noviembre y el 12 de diciembre de 2018, con inversiones millonarias. Durante la pesquisa, se descubrió que estas entidades llevaron a cabo ventas simuladas de bienes en un intento por encubrir su origen ilícito y eludir la detección por parte de las autoridades.
Andrés Mauricio Vélez Hernández fue condenado por el Tribunal del Distrito Sur de Florida División de Miami el 21 de septiembre de 2021 por el delito de conspiración para distribuir cocaína, sabiendo que sería importada a Estados Unidos.
En este contexto, las propiedades afectadas han quedado bajo la administración de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), entidad encargada de gestionar los bienes objeto de extinción de dominio. Esta operación representa un importante golpe contra las estructuras financieras vinculadas al narcotráfico y reafirma el compromiso de las autoridades colombianas en la lucha contra este flagelo.