Este 14 de enero, las autoridades colombianas confirmaron la captura de Luis Guillermo Estupiñán Quiñones, conocido en el mundo del crimen como alias «El Indio» o «Memo«, en el departamento del Putumayo.
El sujeto es señalado de ser uno de los cabecillas de una organización criminal dedicada al tráfico internacional de drogas, especialmente cocaína, que operaba en la región fronteriza entre Colombia y Ecuador.
La detención de Estupiñán Quiñones fue producto de una operación conjunta entre la Policía Nacional de Colombia, la Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos y las autoridades del Reino Unido. La captura se llevó a cabo luego de una solicitud formal emitida por la Corte del Distrito Sur de California, Estados Unidos, que había emitido una orden de captura en su contra debido a su vinculación con el narcotráfico a gran escala.
El general William René Salamanca, director general de la Policía Nacional, detalló que alias «El Indio» lideraba una sofisticada red logística dedicada al transporte y ocultamiento de grandes cargamentos de cocaína, que eran trasladados por tierra desde zonas productoras en Colombia hacia puntos de acopio cercanos al Puerto de Buenaventura, en el Valle del Cauca, y zonas clandestinas en Nariño, Cauca y Ecuador. Esta red operaba con el objetivo de enviar droga hacia Estados Unidos, uno de los principales destinos de las sustancias ilícitas producidas en la región.
¡Cayó capo colombo-ecuatoriano! En Puerto Asís (Putumayo), en coordinación con la @DEAHQ y autoridades del Reino Unido, capturamos al extraditable Luis Guillermo Estupiñán Quiñones, alias ‘El Indio’ o ‘Memo’, solicitado por la Corte del Distrito Sur de California, Estados Unidos.… pic.twitter.com/QoIkWTtX1L
— General William René Salamanca Ramírez (@DirectorPolicia) January 14, 2025
Aprovechando su doble nacionalidad, colombiana y ecuatoriana, Estupiñán Quiñones lograba cruzar sin problemas la frontera entre Colombia y Ecuador, lo que le permitía establecer vínculos con narcotraficantes y coordinadores de redes de tráfico en áreas costeras estratégicas. Estos vínculos facilitaban las operaciones ilícitas y el flujo de estupefacientes hacia otros países, según informaron fuentes oficiales.
A pesar de su bajo perfil, alias «El Indio» manejaba con gran destreza las redes del narcotráfico, utilizando una infraestructura logística altamente sofisticada que le permitía evadir los controles terrestres y marítimos de las autoridades en la región. Su modus operandi, descrito como meticuloso y discreto, le permitió operar durante un largo periodo sin ser detectado.
