Indignante: Niños como mensajeros de la muerte

0
66
Foto: Red+

Un reciente informe revela que el frente Carlos Patiño de las disidencias de las Farc está utilizando a menores de edad para transportar explosivos, poniendo en grave riesgo su vida y seguridad.

En un preocupante giro de los acontecimientos en el departamento del Cauca, las autoridades han denunciado que el frente Carlos Patiño de las disidencias de las Farc está reclutando y utilizando a menores de edad para transportar explosivos. Esta alarmante práctica pone en grave riesgo no solo la vida de los niños, sino también la seguridad de las comunidades en las que operan.

La información fue confirmada a través de interceptaciones telefónicas a un cabecilla del grupo armado. En una de las grabaciones, se escucha claramente al líder insurgente instruir a sus subordinados sobre cómo emplear a los “peladitos” para llevar los “regalitos” explosivos a zonas de combate. «Cinco mil pesos, hermano, cinco mil pesos para que lleguen ahí», se escucha en el audio, destacando la suma irrisoria que se les ofrece a los menores por asumir este peligroso trabajo.

Las autoridades interpretan que el objetivo de estas organizaciones es utilizar a los niños como mensajeros, bajo la falsa premisa de que su juventud les permitirá evadir la atención de los soldados. Esta estrategia revela un uso desgarrador de la infancia, explotando su vulnerabilidad en un conflicto que ya ha cobrado demasiadas vidas.

La inteligencia militar ha confirmado que la voz en los audios pertenece a uno de los líderes más activos en la región de El Plateado, donde la presión de las fuerzas armadas ha aumentado. La operación Perseo, lanzada por el Ejército Nacional, busca desmantelar la estructura de estas disidencias y restaurar la seguridad en la zona, que ha sido gravemente afectada por la violencia.

Lea también: “Iván Mordisco”: El Guerrillero que siembra el terror en Colombia

Los defensores de derechos humanos han condenado estas prácticas y han hecho un llamado a la comunidad internacional para que intervenga y proteja a los menores de edad en Colombia. La situación en el Cauca es un recordatorio escalofriante de la necesidad de abordar las raíces del conflicto y de garantizar un futuro seguro para todos los niños.